GRONE RUNNERS, EL FÚTBOL Y EL RUNNING EN UNA SOLA PASIÓN
Dicen que el fútbol es pasión de multitudes, y para muchas personas también lo es el running, pero ¿qué pasa cuando ambos sentimientos se fusionan en una comunidad de corredores? La respuesta es Grone Runners.
“Corazón Alianza Lima, corazón para ganar, a la Victoria volveremos, para verte campeonar” no solo es un emblemático cántico que se entona en todas las tribunas de Matute o cualquier otro estadio donde juega el equipo blanquiazul. Es lo que cantan también los integrantes de Grone Runners como banda sonora, cuando salen a trotar por las calles de Lima.
Y así fue este domingo 1 de octubre, fecha especial que no solo dio inicio al mes morado, sino a una gran tradición aliancista de larga data, que consiste en cambiar la camiseta blanquiazul, por una blanquimorada.
Desde las seis de la mañana empezaron a concentrarse en el óvalo de Miraflores hombres y mujeres, de distintas edades y de diferentes zonas de Lima, como Comas, Independencia, San Martín de Porres; Ate, San Juan de Lurigancho, incluso desde Pachacamac. Uno de los asistentes comenta:
“Es que la pasión por Alianza y el running no tiene distancia”.
Casi las 7 de la mañana, hora de partida del trote, ya se habían concentrado cerca de 200 gronerunners. Los organizadores dieron la bienvenida, las pautas y orientaciones técnicas y de seguridad del trote. “Gronerunners es una comunidad sin fines de lucro, ni distinción alguna, la única razón que nos une y compartimos es la pasión por Alianza Lima, el running y el trailrunning”, explican los organizadores.
“Corremos en grupo, sin embargo, corremos con los demás y no contra nadie o ningún otro grupo. Como hinchas y runners nos mueve la pasión por Alianza, pero no la irracionalidad del fanatismo”.
Otra vez con el “Corazón Alianza Lima, corazón para ganar, a la Victoria volveremos para verte campeonar”; se dio inicio al trote por la avenida Arequipa, en dos distancias, 5k y 10k. El grupo avanzó como una marea blanquimorada; en el camino la gente alentó, aplaudió y acompañó los cánticos de Alianza, hasta la policía no solo paró el tráfico para que pasen los gronerunners, también soltó un sonoro Arriba Alianza.
Los kilómetros avanzaron y con ello el cansancio en algunos, y la intensidad en otros también, pero no importó el físico, el ritmo o la velocidad, a diferencia del runner típico, los gronerunners no estuvieron atentos a sus relojes con GPS, es más, la mayoría no los tenía, pero sí a algo fundamental: sus celulares con cámara para inmortalizar su emoción en fotografía y video durante cada paso, cada detalle del trote.
Vuelta de retorno con los cánticos y la emoción a tope, finalizó el trote, las fotos y videos finales de rigor. Un participante, extenuado, pero feliz, dice:
“Entendí que esta es la oportunidad perfecta para cumplir no solo un sueño, sino el de mi esposa y mi hijito de sentir la pasión por Alianza y a la vez correr, sin ir al estadio”
Los organizadores de Gronerunners se despidieron agradeciendo la gran concurrencia y anunciando que esto es solo el inicio, y que vendrán más trotes y actividades de integración.
En un contexto donde el fanatismo se traduce en irracionalidad y violencia en el fútbol, experiencias como Gronerunners sirven para sumar esfuerzos y movilizar emociones profundas como es el hinchaje por Alianza Lima, de manera positiva, constructiva y saludable. En pocas palabras: vivir la pasión por el fútbol como es el aliancismo, más allá del estadio, corriendo en las calles.
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